martes, 15 de diciembre de 2009

El cuento de la lechera: episodio II

Más de un mes he tardado en retomar las baldosas, pero ha sido un periodo de mucho jaleo, muchas cosas y poco tiempo... ahora parece que en parte me recupero o adapto, no está la cosa muy clara...

A finales de agosto os contaba mi particular cuento de la lechera (recordar aquí), con la ironía de pensar que luego nada se cumpliría, como acostumbraba a ser los últimos años... pero hay veces que los cuentos cambian, el cántaro no se rompe y toca afrontar nuevos retos...

Sólo son seis las asignaturas que me quedan para terminar esta carrera de fondo que es Montes, buen número teniendo en cuenta que es mi media de asignaturas aprobadas por año, algunos años más, otros años menos...

Estoy metido de pleno con el carné de conducir, con la relatividad de los test, los líos de las luces antiniebla, las velocidades máximas en función de la vía por la que circules... me quería presentar al teórico antes de Navidades pero no pudo ser por la escasez de convocatorias y lo complicado de mi agenda... sobre este tema hablaré más bien poco, para evitar las "presiones innecesarias" que supone el ¿suspender? y aprobar exámenes o el número de test o clases prácticas que llevo...

Después de vivir en primera persona la escena de Asterix y las 12 pruebas (la de las ventanillas y subir y bajar escaleras) conseguí que la beca y el proyecto fueran lo mismo... no era la idea primera e inicial que tenía de proyecto pero me motivaba lo suficiente ("Bioinoculación de micorrizas para mejora de planta forestal")... quince horas semanales "teóricas" que se han convertido en muchas más en la práctica...

Vale, el cántaro tiene una fisura, le ha salido hoy... el proyecto parece que se cae, las raices tenían que tener mayor número de micorrizas y no es así, toca replantear la idea o esperar un año entero más (y tirar por tierra el mes y medio que llevo con ello y tener que repetir una lista de pruebas bastante monótonas) o cambiar de profesor y proyecto dentro de la misma cátedra... a ver, pero tocará esperar a la vuelta de Navidades para saber las posibilidades reales y el consiguiente veredicto...

En breve, os contaré mi experiencia de becario, algo así como "En busca de la micorriza perdida"...

...continuará...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jolín...qué faena,pero no desesperes, eh??
Sara